La última imagen de Ingrid Betancourt en cautiverio, difundida el 30 de noviembre de 2007
ABC. BOGOTÁ.
La rehén más connotada y esperada de la narcoguerrilla colombiana de las FARC, Ingrid Betancourt, fue rescatada ayer junto con tres estadounidenses y otros once miembros de las fuerzas de seguridad tras una operación del Ejército colombiano.
La ex candidata a la Presidencia, que fue secuestrada hace seis años junto a la recientemente liberada Clara Rojas, se había convertido en el símbolo de la resistencia frente a la crueldad con sus cautivos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y sus últimas imágenes en vídeo, que mostraban un evidente deterioro físico, conmovieron al mundo entero.
Centenares de colombianos salieron con banderas a las calles nada más conocer la noticia, mientras los automóviles hacían sonar sus bocinas.
El ministro de Defensa explicó durante una rueda de prensa que los quince liberados se encontraban «sanos y salvos» y que el rescate se produjo en una zona selvática del departamento de Guaviare, en el suroeste de Colombia. En concreto, la liberación se produjo a 72 kilómentros al sur de la ciudad de San José del Guaviare, capital departamental, en un paraje sobre el río Apaporis, en una operación realizada por un grupo elite de las Fuerzas Armadas colombianas.
Labor de Inteligencia
El rescate se decidió al parecer después de que las Fuerzas Armadas lograran infiltrarse en el secretariado (cúpula de mando) de las FARC. Juan Manuel Santos explicó que «a través de diferentes procedimientos se logró también infiltrar al secretariado. Como los secuestrados estaban divididos en tres grupos, se consiguió que se reunieran en un solo sitio y luego se facilitara su traslado al sur del país para que supuestamente pasaran directamente a las órdenes de Alfonso Cano», el nuevo líder de la narcoguerrilla después de la muerte de Manuel Marulanda a finales de marzo.
El ministro colombiano insistió en que el Gobierno seguirá trabajando en la liberación de los demás secuestrados e hizo una llamamiento al grupo narcoterrorista, que vive sus horas más bajas, con la muerte de sus principales cabecillas, para que «no se hagan matar, liberen a los (otros) secuestrados y no sacrifiquen a sus hombres». Durante el rescate las fuerzas militares capturaron a varios guerrilleros, entre ellos un jefe de las FARC conocido sólo como «César», según anunció el ministro de Defensa.
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